Tomar un palo de golf por primera vez y después de dos intentos en los que pegar a la bola parece una quimera, hacer contacto con la cara de tu hierro y la bola. Las probabilidades de que surja un gran slice en ese primer golpe y en la mayoría de los venideros son muy altas pero, ¿es posible pegar a la bola siempre recta, desde el primer impacto?
Una compañía llamada Polara Golf ha desarrollado una bola capaz de volar más recta y evitar ese odiado efecto hacia la derecha del objetivo, prometiendo transformar nuestras vueltas en agradables paseos de tee a green, sin complicaciones. Evidentemente, escompletamente ilegal y muchos puristas del deporte ya han criticado cualquier tipo de evolución en este sentido. El diseño de la bola no es demasiado complejo si tenemos en cuenta el gran cambio que supone en el vuelo de la bola. Consta de dos tipos de hoyuelos distribuidos en dos zonas. A lo largo de lo que sería el “ecuador” de la bola los hoyuelos son poco profundos, provocando que la bola tenga un eje de giro más horizontal y haciendo que la rotación lateral de la bola disminuya, es decir, el hook o el slice se verían tremendamente moderados. En ambos “polos” de la bola la concentración de hoyuelos es mayor y son más profundos, reforzando el mismo eje de giro más horizontal. Junto a los hoyuelos superficiales consiguen generar menos resistencia al avance hacia los laterales por lo que nuestras bolas saldrán más rectas y un poco más bajas. Si los dioses del golf levantaran la cabeza se espantarían ante el que, probablemente, supone el mayor desafío del golfista. Sin embargo una mentalidad más práctica puede pensar que, en el caso de principiantes, puede ayudar a ver el deporte con mejores ojos. Si pegar una buen golpe cuesta muchos cubos de bolas y unas cuantas tardes de sudor y esperanza, Polara Golf plantea un camino mucho más sencillo y que puede llevarnos a encontrar la magnífica sensación de ver tu bola al lado de bandera. Evidentemente, no es el camino que se debería seguir pero nos facilita la sensación que hay detrás del esfuerzo y la práctica. ¿Hasta qué punto amenaza una bola como esta la esencia del deporte? La USGA ya se ha pronunciado declarando la bola ilegal, por lo que nunca la veremos en un torneo de élite. Por otra parte puede ayudar a terminar una vuelta de golf en cuatro horas o ayudar a no hacer demasiado el ridículo en una vuelta con tu jefe. En definitiva, puede resultar útil en determinadas situaciones. Los datos del crecimiento del golf durante los últimos años no han sido precisamente halagadores y puede que mayores facilidades, sobretodo al comienzo, impliquen un mayor rendimiento a largo plazo. Las reacciones que esta bola provoca en los ámbitos más especializados son de rechazo y hasta de insulto pero no deja de ser una posibilidad más, al alcance de todos. Ya sabéis, no dejéis de mirar que bola juega vuestro oponente el domingo.
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